<Paula>
Tu corazón no daba a basto, y lo decías en el sentido de que ya no te entraba tanta felicidad en el cuerpo.
Estabas enredada entre sus brazos, escuchando los latidos de su corazon, los cuales eran tranquilos y pausados, Pedro se había quedado dormido, y vos estabas disfrutando del privilegio que estabas teniendo, mirarlo detenidamente, apreciando sus rasgos más de cerca...enamorandote un poquito más de el.
Sonreiste al recordar las palabras dichas un rato atrás. Te había dicho que te quería...ni siquiera habías podido reaccionar en ese momento, y tampoco era que lo estabas haciendo ahora, pero simplemente no podías creerlo. Te acercaste y besaste su mejilla para luego levantarte suavemente, intentando no despertarlo.
Este día había comenzado siendo el más increíble de todos.
Llevabas unos pocos minutos dentro del baño, cuando sentiste que la puerta se abrió, era Pedro y con carita de asustado, sonreiste al verlo entrar.
-¿que pasa? -- preguntaste y el cerro la puerta detrás suyo--
-me asusté, pensé que te fuiste --dijo el y sonreiste para luego acercarte y rodear su cuello con tus brazos. Dejaste un beso en sus labios y juntaste tu frente con la suya--
-aca estoy--dijiste y el te abrazo--
-te quiero --dijo una vez más, haciendo que tu estómago se retorciera, pero de la emoción. Sin embargo, no te sentías preparada psicológicamente para darle una respuesta, pero no porque no sintieras nada, sino porque las condiciones de la situación que estabas atravesando, no eran las óptimas para dar amor sin reparos...aunque últimamente tu vida giraba en torno a él, merecía una respuesta. Le sonreiste y lo besaste con muchas ganas, demostrándole con ese beso, lo que no podías con palabras.
Luego de varios minutos y por falta de oxígeno, tuvieron que separarse, pero aún así seguían regalándose una sonrisa.
-¿que querés hacer? --preguntaste mientras acariciabas sus brazos de arriba hacia abajo. Eran las partes de su cuerpo que más te gustaban, por supuesto que habían otras, pero sus brazos podrían entrar en la lista de tus debilidades en cuanto a el.
-hacerte el amor y tenerte entre mis brazos hasta que me eches de acá--dijo el, escondiendo su cara en tu cuello, vos reiste y besaste su mejilla--
-loco-- dijiste y te separaste de el, para darle un poco de privacidad--
Una vez en la habitación, dejaste escapar un suspiro para luego sonreír, te acercaste al armario para poder sacar sábanas limpias y cambiar las de la cama. No era que estuvieran sucias, sino que estaban impregnadas con el perfume de Pedro y no querías problemas.
El salió del baño y te miro frunciendo el ceño.
-¡¿que haces?!-- pregunto el, mirandote-
-voy a cambiar las sábanas. Esas tienen tu perfume --dijiste encogiendote de hombros--
-¿y no te gusta mi perfume?-- pregunto el, haciéndote sonreír. Creías que no había absolutamente nada en el que no te gustara-
-me encanta...pero no creo que a Mauricio le guste --dijiste y el hizo una mueca--
-¿hace falta mencionarlo?-- pregunto molesto y te sentiste una estúpida--
-no. Perdón, no me di cuenta-- dijiste y le hiciste un puchero que lo hizo sonreír--
-ademas--dijo acercándose por detrás. Vos sonreiste-- no se porque las querés cambiar ahora...si todavía no terminamos de usar la cama --dijo susurrándote en el oído y abrazándote por la espalda, logrando estremecerte--
-¿ah no?...tenes planes para nosotros?-- preguntaste y comenzó a besar tu cuello. Con su barba te hacía cosquillas--
-tengo todos los planes del mundo para vos--dijo besando tu cuello. Cerraste los ojos para disfrutarlos, hasta que sentiste que su beso duraba mucho. Abriste los ojos de repente--
-¡mi amor no! ¡Chupones no!-- dijiste riendo y empujándolo con tus codos. El te abrazo más fuerte--
-¡¿que dijiste?!-- pregunto el, dandote la vuelta y pegando su frente con la tuya--,
-que no me hagas chupones...se me va a notar después -- dijiste abrazándolo y escondiendo tu cara en su cuello--
-eso no...me dijiste otra cosa --dijo el, acariciando tu espalda por debajo de su camisa, la misma que tenías puesta--
-¿otra cosa?-- preguntaste levantando la vista. El tenía una sonrisa enorme--
-me dijiste mi amor-- dijo el sonriendo y abriste los ojos con sorpresa al mismo tiempo que te sonrojabas. No te habías dado cuenta...pero si se lo habías dicho. Volviste a esconder tu cara en su cuello y te quedaste alli-- me encantó...vos también sos mi amor --dijo agachandose un poco para decírtelo al oído--
El te obligo a levantar la cabeza, ambos se miraron a los ojos y el te sonrió para luego besarte. Sonreiste entre medio de los besos y sentiste las dichosas mariposas en el estómago.
Todo comenzaba a ponerse un poco intenso hasta que de repente escucharon que tocaban la puerta. Tu corazón se detuvo y te separaste de el rápidamente.
-Pepe-- dijiste mirándolo asustado--
-esperabas a alguien?-- pregunto con la misma cara de asustado que vos. Negaste con la cabeza y tomo tu mano--tranquila...anda a ver quien es. Yo ordenó esto un poco y me escondo....anda --dijo el. Dandote un beso.
Lentamente y con miedo te acercaste hasta la puerta. Quizás Mauricio olvido algo. Mientras caminabas rezabas para que no fuera el.
Abriste la puerta lentamente y sentiste que el alma te volvió al cuerpo cuando viste a Maia frente a vos y mirándote preocupada. La abrazaste con fuerza y ella se separó totalmente confundida.
-No tengo plata para prestarte...perdóname --dijo ella y vos te separaste soltando una carcajada.
-¡¡¡estupida!!! -- dijiste golpeándola en el brazo--
-no se me ocurre el porqué de tu amor repentino--dijo ella entrando, vos cerraste la puerta y suspiraste--
-no te esperaba--dijiste--
-me dijiste que venga. ¡¿Sos idiota?!-- pregunto ella y te acordaste que le pediste que viniera a desayunar. Pero ya lo habías hecho con Pedro--
-perdon...me olvidé--dijiste y ella te miro de arriba abajo. Tenías puesta la camisa de Pedro y mordiste tu labio inferior, ella sonrió--
-¿esta acá?-- susurró y vos asentiste--con razón tu felicidad, mira si era Mauricio y vos con esa camisa que no es suya -- dijo y te encogiste de hombros, no lo habías pensado--
-no se....no me di cuenta --dijiste y ella sonrió--
-lo quiero conocer....por favor--dijo ella juntando sus manos. Vos sonreiste--
-okey...pero trata de parecer normal. Por favor --dijiste y ella río--
Caminaste hasta el cuarto otra vez y cuando entraste viste que todo estaba impecable.
Hasta las sábanas habían sido cambiadas, sonreiste y mordiste tu labio inferior. ¿Donde se había metido? Pensaste en llamarlo, y recordaste su enorme sonrisa cuando lo llamaste de esa forma cariñosa, hasta te había gustado llamarlo así.
-¿mi amor? ¿Donde estás? -- preguntaste imaginando su sonrisa al escucharte llamarlo así. Caminaste hasta la cama y te fijaste debajo, ahí no estaba. Así que cambiaste de dirección hasta el vestidor-- ¿mi amor? -- dijiste abriendo la puerta y encontrándolo totalmente vestido pero sin su camisa y con las sábanas en sus manos. Sonriendote de una forma que hacía que tus piernas temblaran--
-amo escucharte decirme así...¿quien era?-- pregunto el, saliendo del armario y robandote un beso en el camino--
-es Maia, mi mejor amiga...te quiere conocer --dijiste sonriendo--
-ah, ¿esta ahí afuera?-- pregunto y asentiste--
-veni, vamos --dijiste tomando las sábanas y llevándolas con vos para dejarlas en el lavarropas--
-Pau...mi camisa --dijo el, y te diste la vuelta para mirarlo, mordiste tu labio inferior. El pantalón de vestir que tan lindo le quedaba y el con el torso desnudo...la octava maravilla del mundo--
-uy...si, toma, no quiero que te vea asi-- dijiste desprendiéndote la camisa bajo su atenta mirada, el te miraba con los ojos abiertos y vos reiste para tirar de su mano hacia el cuarto--
Le devolviste su camisa y vos te cambiaste para luego llevarlo al living donde Maia los esperaba con los mates. Ella se quedó boquiabierta al verlo, seguramente había olvidado lo lindo que era.
Pedro y Maia habían pegado buena onda, los tres se quedaron hablando largo y tendido. Agradeciste que ella no hubiera hecho ningún comentario sobre la situación de ambos.
Estabas contenta...feliz.
...............…...…….………
Hola hola!!!!!! presente aqui como lo habia prometido. Espero que les vaya gustando la historia, por favor, COMENTEN....
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Que amor!!!
ResponderEliminar😍😍😍 Que enamorados que están!!
ResponderEliminarYa arriesgan todo!! Quiero que estén juntos bien de una vez por todas! 😊
Ayyyyyyyyy, qué lindo cap, pero qué susto cuando sonó el timbre jajajajaja.
ResponderEliminarexcelente como siempre, que susto que se llevaron
ResponderEliminar@pedropaulaoli4
Me encantó el "mi amor" fue lo masa...
ResponderEliminarSe está poniendo interesante. Me encanta la historia
ResponderEliminarQue lindo!!!!! Quiero que están juntos sin terceros jajajaja me encanta tu novela!♡
ResponderEliminarHermoso capítulo!!!!!!!!!
ResponderEliminarQ corta mambo la amiga jajaja
ResponderEliminarTanta felicidad me da miedo
ResponderEliminarUff pense que era Mauricio en la puerta! Cada vez mejor!
ResponderEliminarEsta novela es adictiva!!!!!!!!
ResponderEliminarHermoso cap @rociibell23
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