Capitulo 33

<Pedro>

Aun seguías en estado de shock, no podías creer lo que habías visto hace un rato atrás. Tus manos sudaban y tu cabeza iba a mil, al igual que tu pulso. Era un peligro que estuvieras manejando con tu mente puesta en Paula, pero era inevitable. Sentias que todo estaba revolucionado en tu interior….y solo habia sucedido con una mirada de su parte.

-¡Pedro!—escuchaste el grito de Lucia, el mismo que te hizo volver a la realidad—

-¿Qué paso?, perdón…tenia la cabeza en otro lado—dijiste regalándole una sonrisa, ella tomo tu mano—

-te preguntaba como te habia ido hoy—dijo ella—

-ah, primero empezó todo trastabillado, pero despues con la ayuda de papa, todo salio perfecto—dijiste—

-¿Qué paso?—pregunto ella—

-el gerente del departamento de recursos humanos se enfermo justamente hoy, y falto…todo estaba revolucionado y nada, al parecer los empleados no estaban al tanto de que hoy comenzaban—dijiste—

-pero, ¡¿Cómo puede pasar eso?!, es una irresponsabilidad—dijo ella, y asentiste—

-por supuesto que lo es, y va a tener sus consecuencias, pero ya no quiero pensar en eso—dijiste y ella asintió para luego dejar un beso en tu mano—

Una vez que llegaron al restaurante pactado, vos y Lucia ingresaron. A penas verlos, tu mama salto de su asiento para acercarse a saludarlos, primeramente a vos, luego saludo cordialmente a Lucia, al igual que tu padre.

Ni bien tomaron asiento, tus padres comenzaron a charlar sobre lo que habia acontecido a lo largo del dia, pero que luego pudo ser salvado gracias a Dios…intentabas con todas tus fuerzas mantenerte allí, con ellos, pero lo cierto era que tu mente estaba puesta en ella, en la dueña de tus pensamientos que casualmente era la misma persona que hace cuatro años atrás.

-¡Pepe!—dijo tu mama llamando tu atención, vos sacudiste tu cabeza y la miraste—

-¿Qué te pasa loca? ¿Por qué gritas?—preguntaste divertido—

-te estoy hablando desde hoy  y no me das articulo—dijo ella enojada—

-desde hoy esta asi, no se que le pasa—comento Lucia, divertida tambien. Miraste a tu mama y ella te miraba, sabias perfectamente lo que esa mirada significaba y tendrías que evitarla lo mas que pudieras, ella tenia el don de descubrir todo, y no querias que supiera este secreto tuyo—

El almuerzo llego  a su fin, y nunca estuviste mas agradecido, ya no te quedaban mas recursos para sacar a flote las conversaciones, pero lo hiciste hasta el fin. Tu mama se despidió con un enorme abrazo, y por supuesto pidiendo que le contaras lo que estaba pasando, obviamente desviaste sus preguntas como un campeón, y finalmente tuvieron que irse.

Lucia y vos volvieron al departamento, en todo el camino ella venia contándote acerca de su trabajo, y que ni bien pusiera un pie dentro, comenzaría a trabajar en el nuevo proyecto…sentiste un poco de molestia al recordar quienes eran sus nuevos jefes y tu poco buen humor decayó, Paula iba a casarse.

-mi amor…voy a estar en la oficina—dijo ella, haciendo referencia a tu despacho. Vos simplemente asentiste, ella se acercó a darte un beso en la mejilla y volviste a quedar en soledad-

Te pusiste de pie y caminaste hasta tu habitación, para abrir las puertas del balcón y respirar aire fresco…Paula habia vuelto a irrumpir en tu vida, y nuevamente sin haberlo buscado. Sacaste tu celular del bolsillo, y entraste a Instagram, para mirar sus fotos por primera vez en el dia. Por tu mente se cruzó una idea descabellada, pero no tuviste tiempo a pensar cuan descabellada era, hasta que te diste cuenta de que estabas llamándola…pero ya era tarde para el arrepentimiento, ella habia respondido.

-¿hola?—escuchaste del otro lado, vos te aclaraste la voz, y te esforzaste por parecer normal—

-Hola—dijiste y miraste hacia la puerta de tu habitacion—

-¿Quién habla?—pregunto ella, y miraste hacia la ciudad…¿ya habia olvidado de tu voz?—

-crei que todavía me seguías pensando—dijiste, en un atisbo de valentia—

-Pedro—la escuchaste decir…y pensaste en cuanto te gustaba escuchar tu nombre de sus labios—

-el mismo—dijiste y  recargaste tu cuerpo contra la baranda, con la vista hacia el interior de la habitación—

-¿Qué pasa?—la escuchaste preguntar, sonreiste—

-¿Cómo que, qué pasa?...creo que sabes perfectamente que pasa—dijiste, y sentías como un deja 

vu…ya habias pasado por eso un par de meses atras—

-no, no se…por algo te lo estoy preguntando—la escuchaste decir un poco, ¿molesta?, sonreíste—

-volvimos a vernos…¿te parece poco?—preguntaste vos, haciendo alusión al tremendo acontecimiento del que habían sido un tanto protagonistas—

-si, ¿Qué tiene?—pregunto ella, intentando restarle la importancia que merecia—

-estabas hermosa—dijiste en un suspiro…era la verdad, estaba bellísima—

-gracias—dijo—

-y te vas a casar—dijiste tambien—

-si—dijo ella—

-¿estas segura?—preguntaste, y te sentiste un estúpido—

-¿Qué es esa pregunta?—pregunto ella—

-¿tan rápido te olvidaste del viaje?—preguntaste ¿molesto?, ni siquiera tenias ningún tipo de derecho a decirle tales palabras—

-¡¿Qué estas diciendo?!—la escuchaste indignada y mordiste tu labio inferior. Habias metido la pata—

-nada…discúlpame—dijiste y cerraste tus ojos…esta mujer te hacia perder todo tipo de coherencia—

-¿Por qué me llamaste?—pregunto ella de repente. Y te viste a vos mismo haciéndote la misma pregunta. ¿Qué le responderías?, ni siquiera sabias la respuesta…¿o si?, morias por verla de nuevo, y quizás en algún lugar de tu inconsciente eso estaba establecido, que simplemente lo hiciste—

-porque estoy muriendo por volver a verte—dijiste casi sin poder callarte…sorprendiéndote a vos mismo de haberlo dicho. Pero al fin y al cabo, era la verdad—

-Pedro—dijo ella en un suspiro—creo recordar que nuestro acuerdo fue por unos días…volvimos a la realidad. Por dios...tu esposa es tu realidad—dijo ella, y cerraste tus ojos…no querias traer a Lucia ahora—

-y lo se…creeme que lo se, y tambien necesito que creas que intente volver a mi realidad, pero la verdad es que no pude hacerlo del todo…no cuando todavía tengo esos días grabados a fuego en mi memoria Paula—te escuchaste diciendo lo que en verdad sentias…y era asi—

-Pedro…no se puede—dijo ella—

-si se quiere…se puede—dijiste, tu mente se ilumino….era el momento. Respiraste profundo y te armaste de valentía—y tanto lo quiero, que te espero en el hotel Alvear esta noche….no acepto un no como respuesta. Asi que espero verte aparecer….muero por verte otra vez—dijiste, y sin darle lugar a una respuesta por su parte, cortaste la llamada—

Sonreiste con suficiencia…¿la verias esta noche? ¿se arriesgaría?, miraste tu reloj, tenias que tener todo listo si querias que eso pasara.

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Claramente no espero que me perdonen, simplemente porque no me lo merezco mucho que digamos, pero lo que si espero, es que sepan entender que aparte de esto, que me encanta y que es mi via de escape, tengo una vida, me gusta disfrutar de un tiempito mis amigas que dicho sea no pasa muy seguido, y los horarios nuevos que tengo son una mierda, al igual que esta semana que paso y fue dificil, pero finalmente aca estoy. Espero y sepan entender, por supuesto que voy a intentar seguir conectada y subiendo, y hare lo posible por que sea todos los dias, pero si hay dias que no subo, sepan que a veces hay mil variables que pueden estar pasando.♥

Hola hola!!! volvi!!!!! (MAS de 12 comentarios con nombre de twitter, y tienen otro mañana)